| Pobre Matarratas | |
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| Capítulo por temporada | 9 |
| Capítulo en general | 27 |
| Saga | 3 - El secreto de Sebastián Rattengift |
| Fecha de lanzamiento | 14-Enero-2011 |
| Tomo | 4 |
| Personajes en portada | |
| Matarratas Rod Rattengift | |
| Capítulo anterior | Crónica de Ember II |
| Capítulo siguiente | Rencor acumulado |
Sinopsis[]
El capitulo comienza con Kaji y Lluvia despertando, descubriendo que se encuentran atrapados entre los escombros del derrumbe, sin poder salir por los riesgos de provocar otro. A pesar de las protestas de Lluvia, Kaji consigue convencerla de calmarse. Su única salida es que Sôkar rastree a Lluvia a través de su conexión.
Del otro lado, Sôkar y Zap discuten que hacer. Sôkar se compromete a encontrar a todos, Kaji incluido, pero que necesitaría tiempo para rastrear la sombra de Lluvia. Detrás de ellos oyen una respiración.
Matarratas se encuentra en medio de la oscuridad, problema que soluciona con un truco de quimioluminiscencia. Al iluminar el lugar, descubre un mural idéntico a una pagina del libro, a la vez que Sôkar y Zap se encuentran con Uroboros, listo para atacarlos.
En una situación desfavorable para Sôkar, es Zap quien se ve obligado a actuar, haciendo uso de su velocidad y técnicas eléctricas, consigue evitar los ataques de la serpiente, mientras Sôkar trata de encontrar una forma de salir.
Matarratas, dispuesto a buscar a los demás, se encuentra con las dos personas que menos esperaba: Desangrador y Rubeola. Ambos diciendo que se aleje del otro.
Confuso, no sabe en quien confiar, pero las dudas hacía su hermana vuelven a surgir y empieza a desconfiar de ella, en ese momento Desangrador le revela la verdad, Rubeola no es su hermana, sino una niña que se hizo pasar por miembro de su familia con una falsa identidad. Ese hecho despedaza a Matarratas quien decide confiar en Desangrador.
De repente, Desangrador le ataca y arroja entre los escombros, diciendo que confiar en la persona equivocada se paga caro. Trata de acabarlo con su siguiente ataque, pero Rubeola lo rescata a tiempo.
Rubeola le explica que lo que dijo Desangrador era verdad, a la edad de 5 años cierta persona, la misma que cometió el asesinato, la había preparado para fingir ser la hermana del único hijo de los Rattengift. Matarratas, aun desconfiando de ella, no comprende quien mataría a una pareja solo para mantener vigilado a un niño. Rubeola revela la identidad del asesino: Desangrador. Matarratas trata de atacar a Desangrador pero Rubeola lo detiene, pues Desangrador lo mataría en un segundo. Matarratas, aun frustrado y confuso por todas las revelaciones, le grita, afirmando que ella no es su hermana.
En lagrimas, Rubeola lo golpea y le dice que ni se le ocurra decir que no es su hermana, pues a pesar de todo, ella lo había cuidado y querido desde el fondo de su corazón, mas allá de que Desangrador la había hecho vigilarlo, ella lo había educado y alimentado como si de verdad fuera su hermano.
Desangrador, feliz de finalmente deshacerse de esa farsa de "Ancianito entrañable" explica el resto de la historia. El abuelo de Matarratas, Sebastián Rattengift, había sido un talentoso científico que Desangrador había tenido oportunidad de conocer cuando trabajaba para Ébola. Sebastián poseía un Don único que ningún otro elemental de Virus poseía y que la única persona que lo poseía también era su nieto, Matarratas. Este ojo permite ver complejísimas formulas con un único vistazo y que, aprovechándolo, era posible crear el Virus Ocaso. Pero ahora que había descubierto que Kaji poseía el virus en su organismo, ya no necesitaba la ayuda de Matarratas.
No sin mostrar cierta decepción en fracasar en criar a Matarratas para que fuera como él, decide acabar con la estirpe de los Rattengift de una vez por todas.
Rubeola se prepara para combatir, consciente de que el futuro de su hermano esta en juego.
- En este templo milenario ¡acabare con la estirpe de los Rattengift! - grita, listo para atacarlos con todo su poder.